Ella se dirige a su cuarto, quiere algo diferente así que prepara la habitación, flores, perfume, sedas, jazz y a su silla le viste con un abrigo simulando aquel Caballero de Gabán, le observa fijamente con tal deseo que se despierta un erotismo nunca imaginado, su corazón palpita y su cuerpo empieza a dar muestras de su delirio erótico, respira queriendo controlar pero su sentir es más fuerte, sus manos empiezan a recorrer su propio cuerpo…
Viajar es de los grandes placeres de la vida, y el primer tiquete es tu imaginación, ella te lleva a vivir tus deseos, aquellos que están de forma consciente e inconsciente, entrégate a un universo infinito de posibilidades.
Al entregarte a la vida en sus mil y una formas de vivirlas, entiendes que eres el artífice de tu vida a cada instante.